
La noche de este jueves, un total de 59 misiles de crucero Tomahawk fueron lanzados contra la base aérea de Shayrat en la provincia siria de Homs, como respuesta a un supuesto ataque con armas químicas perpetrado este martes en la ciudad siria de Jan Sheijun, en la provincia de Idlib.
El Gobierno estadounidense responsabilizó directamente al régimen del presidente sirio Bashar al Assad por el ataque, a pesar de que las autoridades sirias niegan rotundamente el uso de materiales químicos o tóxicos en contra de sus propios habitantes.
El presidente de EE.UU., Donald Trump ha exhortado a todas “las naciones civilizadas” a unirse a EE.UU. con el fin de “terminar con la matanza y el derramamiento de sangre en Siria”.